1º SEMESTRE
QUIENES VIAJAN EN TRANSPORTE NO OLVIDEN SOLICITAR APUNTES FALTANTES
Taller de Lectura y Redacción I
RECUERDEN QUE PARA TENER DERECHO A PRESENTAR EXAMEN DE TALLER, DEBEN ENTREGAR COMPOSICIÓN DEDICADA A LA HISTORIA DEL MUNDO, DE ACUERDO A LA PELÍCULA QUE VIMOS EN CLASE.
LA COMPOSICIÓN DEBE TENER 3 PÁGINAS DE EXTENSIÓN CON TIPOGRAFÍA ARIAL DE 12 PUNTOS Y DOBLE ESPACIO. SE ENTREGA IMPRESA.
Recuerden que la ortografía se aprende hasta que uno se lo propone.
Repasen las reglas de acentuación.
Bloques
4, 7 y 10
Etimologías I
Diversificación del latín.
¿Por qué no evolucionó en algunas regiones?
¿Cuál fue el caso del griego?
Expansión del Imperio Romano.
Lenguas romances.
Diversas pronunciaciones.
Latín vulgar y latín culto.
Bajo latín.
Latín como lengua muerta.
Latín y uso eclesiástico.
Tipos de escritura romana.
Capital y uncial.
Partes de la oración.
Las partes más usadas.
Las partes variables.
Las partes invariables.
Nombres en latín de las partes de la oración.
¿Qué parte no usaban los romanos?
Definición de lengua de flexión.
3º SEMESTRE
Literatura I
El examen abarca alegoría, Edad Media y Renacimiento.
Les corresponde estudiar acontecimientos que marcan inicio y final de cada periodo.
Sucesos destacados.
Orígenes particulares.
Estructura social.
Filosofía. Concepción del universo.
Sistemas de gobierno.
Monarcas destacados y sus obras.
Obras literarias y temática general.
Autores importantes de España e Italia.
Patrones culturales.
Siglo de Oro Español y los siglos que no duran 100 años.
Busque lo que necesite
1000 Oldies
domingo, 21 de octubre de 2012
jueves, 11 de octubre de 2012
Alegoría de la caverna
Grecia Ludivina Guevara Morado
3º semestre de preparatoria
Platón utilizó una metáfora para su entendimiento, un grupo de personas están encadenadas en una caverna de manera que no pueden salir, desde que nacieron lo único que ven son sombras en la pared, uno de ellos puede soltarse, camina hacia la salida de la caverna, al principio la luz del sol lo enceguece, decide regresar a la caverna por sus compañeros, para que vayan con el pero ellos prefieren quedarse, una vez afuera no vuelve
Se podría aplicar de forma que lo que vivimos diariamente es nuestra realidad, por ejemplo, si yo siempre llegó a mi casa, meriendo, veo la televisión, etcétera, esa sería mi realidad
Es muy difícil que las personas salgan de sus realidades, es decir que cambien la rutina una vez afuera, tienen dos opciones seguir avanzando o regresar a la caverna, que sería nuestra casa, o la televisión.
No necesariamente la televisión o computadoras pueden ser nuestras cadenas para salir de la caverna.
Algunas personas prefieren la seguridad de la caverna en lugar de estar afuera.
Otra forma de aplicarlo podría ser la ignorancia y el conocimiento, la ignorancia ocuparía el lugar de la caverna, y el conocimiento seria el mundo exterior
Hay muchos factores por los cuales las personas no salen de la caverna, el gobierno (las cadenas), te dan la sensación de ser libre, pues puedes estar en la caverna. pero ver los rayos del sol y disfrutar de la vista, es decir te enseñan lo que ellos quieren que sepas, lo que a ellos les conviene, pues si tenemos toda la información completa nos podríamos rebelar y eso es precisamente lo que no quieren.
Pocas personas lograr salir de la caverna, quieren más de lo que ésta les puede ofrecer, mientras que los demás al creer que tienen libertad, comodidad y seguridad se quedan allí, todo lo pueden hacer ahí, piensan que no vale la pena salir de ella.
Mientras que las personas que salen viven mejor y obtienen más conocimientos y experiencias que ocupara, puede ser independiente y valerse por uno mismo, mientras que si a una de las personas de la caverna la pones en esa situación no sabría qué hacer frente al problema o como sobrevivir a la intemperie.
A las personas se les hace más cómodo quedarse en la caverna, porque si saben muchas cosas se asustarían, no podrían manejar tanta información, no serian objetivos para poder encontrar una forma de utilizar bien esa información, pues todos piensan en un bien para ellos no en un bien común.
Si alguna persona llega a descubrir cómo sanar una enfermedad que hasta ese momento era incurable no lo va a mostrar al todo el mundo, si no que lo va a guardar, se lo va a dar a alguien que signifique mucho para él, o bien se lo dará al mejor postor, en lugar de buscar hacer más para poder esparcir el antídoto y que otras personas también puedan gozar de él.
La mejor manera de vivir fuera de la caverna es dejar de pensar en nosotros mismos y preocuparnos no solo por el bien de la raza humano, si no también por los otros seres vivos que habitan el planeta, que toda esa tecnología y avances científicos se utilicen a favor de los demás seres que viven con notros en la Tierra
Deberíamos preocuparnos por los animales en peligro de extinción, por la hambruna en Africa, en lugar de que casi se nos acabe el mundo, porque tuvimos una mala situación sentimental con alguien, o porque no sabemos que vamos a usar para la fiesta, creo que si marcáramos prioridades, verdaderas prioridades podríamos salir todos juntos de la caverna y hacer un bien común.
Los cavernícolas
Énder Velarde García
3º semestre de preparatoria
En esta composición no pretendo encontrar resultados científicos. Más bien, reflexiono y respondo cuantas preguntas puedo; para profundizar así en uno de los tantos temas que apasionan al hombre; el pensamiento como reflejo del momento en el que vivimos.
La alegoría de la Caverna de Platón plantea una situación en la que un hombre encerrado en una caverna oscura escapa hacia a la luz. Se aprecia un contraste de colores descomunal. Hasta el aire que se respira es nuevo.
El fugitivo regresa a la Caverna a contar la experiencia a los que permanecieron en el interior por un designio superior.
No le creen, le desprecian, lo expulsan de su comunidad y lo dejan caer en una oscuridad más solitaria.
La alegoría de Platón brinda elementos para reflexionar. Me atavío de preguntas que dudo pueda responder por lo menos con credibilidad, pues lo verdadero parece escapar de cualquier análisis.
Parto desde una pregunta cuya respuesta quizás se distancie de la realidad más creíble.
Respondo preguntas
¿Cómo pensaban los cavernícolas de 25,000 años atrás? ¿Cómo trabaja el inconsciente de una persona pasiva o un deportista? ¿Cómo es el cerebro de un escritor? ¿Los deportes se inventaron por accidente?
La alegoría de La Caverna bien puede encajar en situaciones de lo más cotidianas, o en aquellas muy específicas.
La Caverna es una analogía entre la mente humana, prestando especial atención en el proceso de pensamiento donde se encuentra nuestro “yo”. Somos reflejo de lo que vemos, sentimos y recordamos.
Para demostrar que cada persona está atada a lo que ha vivido, sentido y pensado, repasemos cada uno de los textos expuestos en la clase de literatura esta mañana.
Todas las composiciones abordan el tema de la alegoría de La Caverna. Cada compañero se desenvuelve en un estilo propio e irrepetible. Cada quién a su paso.
La alegoría de La Caverna incita a hacerse preguntas.
A modo de recomendación general, podríamos empezar preguntándonos qué hay de nuevo en nuestra casa. ¿En qué se diferencia del día de ayer? ¿Hubo cambios importantes?
Después de realizar el ejercicio anterior podríamos preguntarnos qué cambios ocurrieron en el camino de nuestra casa a la escuela.
Más allá de cambios físicos, están los espirituales. ¿Qué siento al salir de casa? ¿Por qué?
Transcurre el año 2012 del siglo XXI. Es martes, aunque el día podría parecer lunes o miércoles.
Estamos atrapados en el conjunto de objetos, personas y situaciones abstractas a las que nos enfrentamos todos los días.
Es como el acto de escribir un cuento. El escritor escribe sobre lo que ve, lo que le apasiona, y se define mediante el contexto de producción.
Podría decirse de manera más poética, que la vida es como un cuento. Si no lo crees, no funciona.
Sería emocionante que cada uno de nosotros encontrara su caverna y se decidiera a encontrar la luz.
Pero, ¿qué conforma a la caverna? No sólo cuenta nuestro sistema educativo empecinado en volver a los estudiantes ignorantes. Tampoco la televisión que pretende culturizar a la población con basura.
Uno mismo construye buena parte de la caverna.
Quizás para sentirnos seguros en un área que parecemos controlar.
Me pregunto si las cavernas deben por ley ser oscuras.
¿No se puede construir una caverna que tenga luz?
¿No se puede construir una caverna que tenga luz?
Supongo que sería posible, pero la luz será artificial, porque uno mismo construye su caverna para estar a gusto.
En lo personal, me gusta mi caverna, aunque tenga una buena cantidad de defectos. Las goteras llenan y llenan cubetas. A veces hay murciélagos, y no es que no me bañe ni que sea “darks”.
Un ejemplo de una habitación de mi caverna sería el de mi oficio de escritor.
¿Alguna vez se han preguntado cómo pienso? ¿De dónde aparecen los cuentos? ¿Los escritores están locos?
Estoy seguro de que algún tipo de locura habrán de tener los escritores para convertir lo más cotidiano en algo fantástico.
Un escritor es capaz de deformar el pensamiento. De ver muchas posibles realidades. Salir a la calle y recabar material para escribir cuentos.
Me parece increíble, pero al mismo tiempo me pregunto si el estar atado a una caverna de escritor (digo atado, porque el oficio es de por vida) es un problema o un don.
¿Qué me habría dicho Platón, o por lo menos los cavernícolas?
Una caverna de por sí es oscura como para desear que la noche se extienda más allá de las veinticuatro horas. Cuando el pensamiento resulta inexistente cuesta más trabajo levantarse. Las personas tropiezan, se ciegan, y hasta se vuelven sordas cuando es siempre de noche.
Lástima que no podamos transformarnos en murciélagos para resignarnos y vivir en las cavernas más distanciadas de la realidad.
Y sé bien que pagar el recibo de la luz es caro, pero hay que hacer un esfuerzo.
La noche desaparece pensando.
Nuestra Caverna es la realidad mezclada con nosotros mismos, que como buenos seres imperfectos, la construimos mal. Eso sin considerar que lo heredado mediante el desarrollo de la civilización esconde infinidad de problemas.
Caverna, libertad y felicidad
Gerardo Carmona Gómez
3º semestre de preparatoria
Una caverna no es necesariamente el escondite de un oso enorme y feroz, ni un espacio fresco y húmedo, u obscuro y caliente; puede ser la terrible pesadilla del saber: la creencia del conocimiento, la creencia de la libertad. Esto basado en la alegoría de la caverna, hecha por Platón (o al menos atribuida a él).
La semana pasada por vez primera vi un vídeo de Internet que ya había sido reproducido millones de veces alrededor del mundo, en él se mostraba la reacción de una pequeña manada de chimpancés al ser liberados después de haber estado treinta años encerrados en un laboratorio; durante ese período, se le había hecho pruebas a los chimpancés con distintas enfermedades que también afectan al ser humano: habían sido contagiados con el virus del VIH y enfermados de hepatitis. No habían tenido la oportunidad de conocer a otro animal que no fuese un chimpancé de esa manada o algunos de los científicos que con ellos trataban. Con vida triste habían sido condenados estos primates, la vasta mayoría de ellos quizá no sabían o no tenían recuerdo alguno de los rayos del sol o de la libertad, que debieron haber conocido al ser arrebatados de sus madres.
Al ser liberados, asomaron su cabeza por la puerta dos o tres de los chimpancés, llenos de curiosidad, de intriga, y, de seguro, de pizcas de miedo. Antes de salir, dos de los primates se abrazan en júbilo, hacen muecas que sin duda se traducen en sonrisas y carcajadas; una escena que estremece los lagrimales de cualquier persona con más de dos milímetros cúbicos de corazón. Inminente se vuelve como el cuerpo de los chimpancés, de un opaco y maltratado pelaje por las enfermedades no refleja más que una pura felicidad. Unos segundos de saltos y gritos entre los monos son una alegre fiesta, festejar un anhelado nivel de libertad, o uno jamás soñado. ¿Será que en su memoria estaba aún guardado el recuerdo de ese libre hábitat en el que vivieron las primeras semanas de su vida, y el volver a sentir el calor del sol lo despertó?
Procedieron al fin a explorar su nuevo ambiente, aunque limitado, los hacía felices, no parecían querer volver atrás; algunos tardaron mucho en salir, quizá perdidos en sus pensamientos, quizá paralizados de felicidad, quizá con temor a abandonar el espacio al que ya estaban acostumbrados; pero ver a los otros y/o sentir soledad los forzó al final a disfrutar de ese nuevo espacio.
Era el laboratorio de manera casi literal la caverna de los primates, una jaula de fuertes rejas que ni un gorila que lance llamas por las manos y con visión láser enojado podría destruir.
Hoy en día estamos acostumbrados y aferrados a las cavernas, cavernas como los centros de educación, que pueden ser al mismo tiempo las antorchas que guían el camino hacia escaleras por las cuales podemos escapar; cavernas como a la que nos ha ayudado a aferrarnos la actual situación del país: no podemos salir, al menos no sin miedo, y de perdido disfrutar de dar un paseo en bicicleta o caminar por la calle hacia una fiesta. Cavernas como esa terrible y útil herramienta, que facilita y entorpece la comunicación: el Internet.
Útil, podemos conocer el resto del mundo, el resto de las culturas del mundo, varias religiones, lenguajes, sin salir de casa; es engañoso, es otra caverna, u otra manera de conservarnos en la caverna, y al mismo tiempo (en la actualidad, en raras ocasiones) otro sendero que guía a una salida. Como puede acercarnos información acertada, puede brindarnos, y en mayor proporción, información falsa, inútil, y guiarnos a la creencia del saber; es común escuchar hoy en día “leí en Internet/ en una revista que” y una afirmación de algo que no está del todo comprobado, y es usual que se piense como verdad absoluta, ninguna otra idea o posibilidad se acepte; debo admitir que me sucede con frecuencia, la tendencia a una mente cerrada “yo estoy bien, tú estás mal” (“porque yo lo leí” “porque me sucedió”) es sin duda otra malévola caverna; no obstante, tampoco es libertad aceptar cualquier otra afirmación sin reflexionarlo.
Dicen que el hambre de conocimiento puede hacernos infelices, alguien quién busca saber más podría verse frustrado ante el no saberlo todo, ante la falta de respuestas o ante el que la vida no le alcanzaría para aprender y descubrir todo; que la infancia es más feliz, pues las preguntas que se hacen los infantes son básicas, y se obtienen respuestas sencillas o fantásticas. Hay curiosidad pero poco pensamiento crítico, entonces cualquier respuesta es buena, que en esa caverna de creer todo lo que se escucha, los niños piensan todo resuelto, todo misterio respondido, a veces con seres divinos; es la caverna más feliz, no hay mucho de qué preocuparse.
¿Por qué habría de hacernos infelices el anhelar el conocimiento? ¿No es acaso libertad? ¿Por qué no podemos ser como los chimpancés ante la libertad? Podemos ser felices de que siempre habrá algo nuevo que aprender, descubrimientos por hacer, hipótesis por cambiar, sería una vida llena de actividad, me suena mejor que “saber todo” y vivir siempre sabiendo o pensando lo mismo, sin importar lo correcto o incorrecto de las ideas. Es triste que la ignorancia sea felicidad, que la libertad de pensamiento sea más bien libertinaje.
Las cavernas y los gobiernos son otro genial ejemplo. Los gobiernos aman las cavernas para el pueblo, las cavernas tan mencionadas con anterioridad, la ignorancia y la de la creencia del conocimiento son las cavernas que más les agradan. Qué riesgo se corre al querer dirigir a un pueblo inculto que cree todo lo que se le dice, un pueblo que no piensa de manera crítica más que al hablar de la vecina, un pueblo que no cuestionará un mandato, por miedo o por conformismo, un pueblo que puede ver que el papel se quema, pero piensa que no sucede así, porque así le dijo la televisora. Cualquier parecido con alguna realidad es mera coincidencia. Al pueblo se le enseña desde pequeño lo que se debe y no se debe hacer, de acuerdo con el gobierno, reglas de comportamiento a veces impuestas por la misma sociedad son absorbidas por la mente de niños, se enseña a confundir el respeto a las autoridades con el silencio, y a través de escuelas, programas de televisión y religiones, hasta las opiniones mismas son impuestas.
¿Será el no cuestionar más allá de lo que se percibe la peor caverna de todas?
Las cavernas
José Armando Salcedo Delgado
3º semestre de preparatoria
¿Qué es una caverna? Todos tienen una, o varias. No me refiero a la casa donde vives. Tampoco a una cueva antigua, con pinturas rupestres .Una caverna, o al menos como lo refiere Platón, tiene que ver con tus alrededores, tu cultura, tus ideologías, tus costumbres, tu forma de concebir al mundo. Tu caverna influirá de forma determinante en el paradigma de tu vida diaria.
Puedes vivir dentro de una caverna sin ningún problema toda tu vida. Te sientes cómodo, o al menos conforme y seguro, con el panorama dictado por la caverna. No hay necesidad de ahondar más. Es más, ni siquiera piensas de forma existencial en la caverna que habitas, solo la aceptas. Pero, comparado con la visión que tiene la gran mayoría de tus semejantes, tu caverna es pobre e inferior. ¿Por qué? ¿Por el simple hecho de ser distintas? Ambas cavernas parecen satisfacer a sus habitantes. Conceden seguridad y, probablemente, felicidad.
¿Será que la ciencia, junto con todos los frutos que ésta conlleva, es una caverna enorme, y muy crítica? La religión y la magia toman lugares muy relegados y separados de la ciencia actual. Están peleadas.
Un típico ejemplo: el origen de los humanos. Con el avance de la ciencia, más y más pruebas respaldan a la teoría de la evolución, postulada en un inicio por el naturalista Charles Darwin. Aún así, hay personas negando su veracidad, apoyando al creacionismo o al Diseño Inteligente, por decir algunos ejemplos distantes, unas cavernas alternas.
Me gusta esta frase de Thor en su última película: “La magia es ciencia que aun no entendemos”. Tal vez, la caverna científica es inferior, comparada con la que sí comprende a la magia.
Apliquemos la metáfora cavernosa a la pelea, que ya parece clásica, entre los líderes de los sistemas operativos para móviles. Los que han probado el sistema operativo de Apple, se habán dado cuenta de la enorme variedad de programas a su disposición, una interfaz muy sencilla de operar y un diseño envidiable de aparatos, todo esto dentro de un ecosistema cerrado. Es una caverna agradable, pero ¿acaso no pueden serlo también las demás opciones, como Android, por ejemplo?
¿Cuál es mi punto? Bueno, el hecho de clasificar a una caverna como mala o buena es meramente subjetivo, y depende de la caverna dónde estás. Es difícil salir de tu caverna, y aceptar paradigmas distintos a los propios. Es incómodo adaptarse a lo sui generis. Puede pasar que te repugna lo descubierto, o te dejas iluminar por el exterior de tu caverna.
Es interesante salir de tu caverna. Por ejemplo, hace poco me explicaron cómo funcionan algunos procesos fiscales y económicos, como los impuestos o la demanda de productos. Yo, en lo personal, estoy en conflicto con la economía. No logro entenderla a la primera. Cuando me lo explicaron con paciencia, porque puedo ser un poco desesperante, me sentí genial. Salí de mi caverna un rato y aprendí.
Hablando de aprendizaje, la escuela es un excelente ejemplo de caverna. Los alumnos, atados a sus bancos sin libertad, ven día tras día las sombras tenebrosas de los temas que, poco a poco, quedarán impresos en sus cabezas, gracias a una amenaza constante de examen. Tal vez suena un poco macabro. Pero, a los niños chiquitos les puede parecer factible. Ronda el rumor de que fue en la escuela donde se inventó la palabra “silencio”, pues es más fácil enseñar si todos están calladitos y sin rezongar. La conversación y los paseos son la mejor manera de aprender, así lo expresaba Aristóteles. De esta forma, se desarrolla el deseo de aprender, de investigar por sí solos. Uno debería ir a la escuela para salir de su caverna, no para entrar en otra.
La ignorancia y el conocimiento son dos cavernas opuestas. Aunque, si los de la segunda caverna invitan a los de la primera a unirse, muchos se resistirán. Es esperada esta reacción. Desde mi punto de vista, la ignorancia es mala. Es ella la que te mantiene un una caverna. En cambio, la curiosidad, la crítica, el escepticismo, te sacan ipso facto de tu caverna, gústete o no lo que veas.
Pero, ahora vean el otro lado de la moneda. ¿Por qué los nacos no se preocupan por cambiar (al menos una gran parte de ellos)? Porque se sienten a gusto, felices. No hay necesidad de cambiar de caverna. Si eres un ferviente budista, y te hablan de la palabra de Jesús (los tan esperados testigos de Jehová que tarde o temprano tocarán tu puerta, por ejemplo), ¿qué pensarás? Ignóralos, estoy a gusto como buen budista.
No justifico de esta manera las diversas cavernas que todo el mundo disfruta o sufre. Por ejemplo, los nacos (manifestación explícita de la ignorancia) se conforman con lo que ven. No se aventuran más allá, para encontrar más conocimiento. El humano regular es curioso por naturaleza, por eso cada cultura logra explicarse preguntas que todos llegarán a hacerse algún día, como el origen del universo, o el nacimiento de los humanos.
Uno puede negar la realidad, aferrarse a su caverna ciegamente. Recuerden, al final de Hombres de Negro 2, K le dice a J que es un novato, por no conocer las dimensiones de su caverna. Ellos son solo un casillero más de entre cientos en un mundo desconocido.
Hace poco una compañera hizo referencia al tipo de ambiente de nuestra escuela. Dijo que era muy tranquila, sin situaciones que otras escuelas presentan, como bullying, alumnado excesivo, etc. Decía que, el hecho de haber estudiado en este tipo de escuelas le dio experiencia para la vida, cosa que parece no aprenderse aquí. Tiene mucha razón. Nuestra caverna es como una burbuja aislada, tal vez no en proporciones descomunales, pero lo suficientes para ignorar de vez en vez cómo es la vida real.
La vida allá afuera es muy distinta, cosa que suele recordarme mi papá. Enfrentarás cosas solo, y no hay tiempo para titubear. Sales de tu caverna para afrontar los desafíos diarios de la vida. Un ejemplo personal es la calle. A mí me suele engañar mi sentido de orientación. No me sé la mayoría de las calles de mi propia ciudad. Y, para amolarla aún más, poco he experimentado un transporte diferente a un automóvil. Cero autobuses. Mi caverna me debilita frente a la vida exterior, cosa que deberé cambiar en el futuro.
Como al entrar en cualquier terreno nuevo, hay que explorar, curiosear, aprender, si se tiene la iniciativa para hacerlo. Eso, en mi opinión, es lo que impulsa a un hombre a salir de su caverna, buscar respuestas diferentes a las suyas, sacrificar su comodidad o conformismo con su antigua caverna, y arriésgalo todo, hasta a ser apartado de los tuyos. Algunos genios, quienes portan nuevas ideas, eran tachados como locos al escapar de la caverna común. Eran visionarios incomprendidos, adelantados a la época donde vivieron. Por ejemplo, cuando Nikola Tesla empezó a publicar sus postulados y planos de la corriente alterna, éstos no fueron recibidos de forma positiva en su totalidad, pues la corriente directa, la más difundida, parecía más fiable. En la actualidad, gran parte de las aplicaciones eléctricas suceden gracias a la corriente alterna.
Así, las cavernas pueden ser malas o buenas, te debilitan, fortalecen, complementan, satisfacen o simplemente te conformas con ellas. Se nos ha repetido de forma constante que el hombre tiene como meta fundamental ser feliz. Quedarte o salir de la caverna te ayudará a cumplir este objetivo. Al final, te das cuenta de que no existe la caverna perfecta. Como dice Albert Einstein: “Todos somos muy ignorantes. Lo que ocurre es que no todos ignoramos las mismas cosas.”
Todos tenemos nuestra propia caverna
Aracely Maribel Díaz Garza
3º semestre de preparatoria
Platón escribió una alegoría que se puede utilizar en el pasado, presente y futuro. Eso es lo importante y significativo que tiene la Alegoría de la Caverna, cada quien encuentra un significado diferente, pero encaminado hacia lo mismo. La alegoría habla sobre cómo unos hombres que han sido encadenados en la caverna no hacen nada para salir, solo observan las sombras que pasan y la luz que se refleja del mundo exterior, pero hay uno que logra romper las cadenas y sale. Sus ojos ven la luz y se da cuenta de lo grande que es su mundo ahora, podría decirse que esa luz que ve es la del conocimiento, una metáfora comúnmente usada. Si regresara con sus compañeros solo lograría ser abucheado y tal vez apedreado, porque a nadie le gusta saber que su mundo se derrumba. Al final explica que el camino del conocimiento es un camino de soledad.
Discutir sobre como todos vivimos en una caverna puede llevarnos a analizar los aspectos que consideramos más comunes en nuestras vidas. Una de nuestras cavernas modernas es la televisión, pues solo vemos las imágenes que pasan en ella y es una forma de mantenernos entretenidos para no quejarnos de lo que pasa afuera en el mundo exterior. Qué pasa cuando la televisión se vuelve el medio que nos hace pensar y conocer más, cuando vemos un documental que deja una marca en nosotros y hace despertar una inquietud y una sed por conocimiento.
Desgraciadamente esta es la razón por la que no pasan documentales en los canales abiertos. Si observamos la programación de esos canales, veremos que no son más que novelas, programas como Acábatelo y más novelas, no nos nutren de conocimiento ni despiertan nuestra curiosidad, solo nos enseñan a esperar a que las cosas pasen por si solas en vez de hacer algo por cambiarlo y trabajar para alcanzar nuestras metas y objetivos para así obtener nuestra autorrealización.
Mencionaron que la caverna más poderosa es la escuela, pues se disfraza como si fuera la luz, pero qué es lo que conocemos ¿todo?, o solo lo que quieren que sepamos para tener entrenabilidad y no mente propia.
Acaso no todos vivimos en una gran caverna, en el pasado y todavía en el presente la iglesia ha sido una parte de esta caverna, pero no ha podido dejar al hombre completamente en la obscuridad pues aun así en la Edad Media, una etapa conocida como la “era oscura” solo fue una forma de encaminar el conocimiento, pues se crearon obras maestras como las iglesias góticas, solo que sus técnicas y sus esfuerzos eran hacia Dios y no hacia su sociedad, su mente o la vida en general.
Después con el renacimiento, este estilo cambiço y el hombre se volvió el centro del universo, pero todavía faltaba más, nosotros no somos el centro del universo, ni siquiera la parte más importante del planeta Tierra, pero el suelo, el aire, los animales y las plantas son fundamentales para nosotros.
Vivimos en una caverna común y también tenemos la propia. La caverna común es la que crean otras personas para nosotros y la seguimos porque confiamos en que está bien, porque siempre hemos pensado que ellos tienen la razón.
Cómo saber si todo es negro o blanco, siempre hay colores intermedios los “héroes” de la independencia no fueron de todo héroes mas así es como la escuela los hace ver; y los villanos que existen en la actualidad ¿son los verdaderos?, o son solo rostros de personas mínimas en comparación a la gran organización y conspiración detrás de ellas. Ahora la caverna propia, a esa depende de ti conocerla, algunas veces es el miedo, otras son las mentiras que te dicen cuando niño.
Lo que debes saber es que una vez salido de esa caverna no se puede volver a entrar y no está asegurado que el mundo sea feliz allá afuera. En todo caso solo debes enfrentarte a tu caverna y estar preparada para lidiar con cualquier cosa que venga.
Cuando somos pequeños la mayoría de las veces nos hacen creer que nuestra familia es perfecta, los más grandes conflictos que tienes son no tener el color favorito de tus crayolas, porque ya lo usaste demasiado.
Recuerdo haber visto las trampas para ratones que ponían en la casa y preguntar qué les pasaba cuando se quedaban atrapados los ratones ahí, mi respuesta fue por suerte para mí, que solo se quedaban un tiempo y después las liberaban en un gran terreno y se encontraban con su familia. Claro que mis papás lo único que hacían era tirarlas a la basura, pero salían por un tiempo para que yo pensara que si las liberaban. A donde quiero llegar es que muchas veces nuestra caverna es mucho más perfecta y bonita de lo que es la realidad.
Por otro lado, también hay cavernas que son peores que la realidad. Un ejemplo es que cuando era pequeña me encontraba en mi cuarto y al ver a la calle vi un murciélago parado en mi ventana, el murciélago me sacó un gran susto y logró obtener mi miedo. Como es normal el murciélago se fue, pero a mí me dijeron que lo habían atrapado. Para ese entonces la planta baja de mi casa todavía no estaba terminada y donde ahora se encuentra el baño estaba sólo un cuarto en obra gris, no era peligroso, pero no debíamos de estar ahí. Como era de suponerse nos gustaba ir a ver, así que inventaron que habían agarrado al murciélago y estaba en ese cuarto por eso ya no entraba por miedo de que me saliera el murciélago. La realidad no era tan mala para mí en ese entonces, como la criatura que me sacó el susto de mi vida.
Te podrás preguntar por qué las personas nos hacen estar en una caverna, ¿qué no es mejor si todos somos personas pensantes y con mente propia? Pues no, si todos conociéramos la realidad nos daríamos cuenta que los que nos hacen vivir así son menos que nosotros y en realidad ellos nos tienen miedo a nosotros por eso no deberíamos de tener ese miedo para lograr liberarnos y luchar en contra de ellos. Porque un pueblo ignorante es un pueblo manejable, así también a la inversa, un pueblo inteligente es un pueblo poderoso.
El mejor ejemplo que se me viene a la mente es la película de Bichos, una aventura en miniatura. Las hormigas trabajan año tras año para juntar comida para los saltamontes, porque piensan que como son más grandes (por su tamaño) las pueden aniquilar, lo que no se dan cuenta hasta el final es que, todo este tiempo ellas fueron más que ellos y que tienen potencial, además las masas son las que ganan las guerras.
Debemos de salir de nuestra caverna más inmediata que es la escuela, no me refiero a decir deserten, pero investiguen mas allá de lo que dicen los libros y los maestros, recordemos que ellos sólo cubren un programa.
viernes, 5 de octubre de 2012
Taller Literario / 2º de secundaria
Vieron una película dedicada a contar la historia del mundo.
Tomaron notas.
Interrumpimos tras la extinción de los dinosaurios.
Deben presentar el lunes un reporte de página y media de extensión.
Usen letra arial de doce puntos y doble espacio de interlineado.
Impriman y peguen en su cuaderno.
Tomaron notas.
Interrumpimos tras la extinción de los dinosaurios.
Deben presentar el lunes un reporte de página y media de extensión.
Usen letra arial de doce puntos y doble espacio de interlineado.
Impriman y peguen en su cuaderno.
martes, 2 de octubre de 2012
Literatura I
Estudiamos la alegoría y como ejemplo clásico revisamos La caverna, de Platón.
Nos adentramos en ella desde diversos puntos de vista que servirán para que redacten una composición de tres páginas de extensión.
Impriman el resultado y preséntenlo el próximo miércoles 10 de octubre.
Nos adentramos en ella desde diversos puntos de vista que servirán para que redacten una composición de tres páginas de extensión.
Impriman el resultado y preséntenlo el próximo miércoles 10 de octubre.
Taller de Lectura y Redacción I / Taller Literario 1º de secundaria
Busquen en el libro de texto todos los apartados dedicados a los signos de puntuación y a la ortografía.
Escriban un resumen y practiquen.
Se revisa el miércoles 10 de octubre.
Taller Literario 1º de secundaria
El lunes 9 deben presentar revisado el texto donde hablaron de las diferencias entre primaria y secundaria.
Escriban un resumen y practiquen.
Se revisa el miércoles 10 de octubre.
Taller Literario 1º de secundaria
El lunes 9 deben presentar revisado el texto donde hablaron de las diferencias entre primaria y secundaria.
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