El otoño / Cory Arteaga de la Cruz

El otoño, ¿qué es el otoño?

Para algunos, una estación del año, para otros hojas naranjas y cafés, pero para mí es algo más.

El otoño me hace pensar en la vida.

Así como las hojas de los árboles cambian, nosotros a lo largo del tiempo también cambiamos.

Y también caemos cuando estamos tristes, del mismo modo en que las hojas caen marchitas cuando ya no se pueden sostener.

El otoño es una estación muy linda, me gusta mucho.

Me hace pensar, me hace recordar libros o películas o incluso videos musicales.

Recuerdo personas sentadas en  una banca del parque rodeadas por muchas hojas amarillas, naranjas, cafés y rojas, mientras observan y sienten el viento en su cara y colándose en sus chaquetas y abrigos.

El otoño es una estación para pensar, o al menos lo es para mí, pues como empieza a anochecer más temprano por el cambio de horario y todo eso, yo me pongo a pensar en la mañana o en la noche sobre lo que me pasa, lo que hice, y si hice algo mal, cómo lo puedo remediar o al menos pienso en remediarlo, pues se me complica mucho vivir con un problema y no poder resolverlo en un momento, porque después me está dando vueltas y vueltas en la cabeza y no me puedo concentrar en otras cosas que hago y luego tengo más problemas, por eso el otoño me gusta para pensar.

Cuando sueño la estación del otoño, me imagino corriendo a mi misma -sola o con alguien-, persiguiendo algo, o solo por correr.

El otoño es muy divertido, me gusta porque no hace ni mucho calor, ni mucho frío, aunque me gusta más el frío, pero el otoño es el clima perfecto, la mayor parte de él.

No hay día de otoño que no piense en que algún día me voy a tumbar en una montañita de hojas caídas de los árboles, pero lo que más me gusta del otoño, lo que definitivamente más más más me gusta son todos los colores que hay en él, pues son colores vivos y además todos se relacionan.

Para mí, en otoño, todo lo que está a mi alrededor, todo, absolutamente todo lo que veo, siento, pienso, vivo, tiene sentido.