Enero 2017
Tabla de Contenidos
Hipótesis
¿Por qué medicina? Me inspiró este título a escribir porque he elegido la
carrera de medicina. En este ensayo quiero dar a conocer la carrera que quiero
estudiar, también unas de mis opciones de especialidades. Comenzaré con el
concepto básico de la medicina, también expresaré las razones por las que
quiero estudiar medicina.
Dedicatoria
Para todos los doctores o personas consagradas al cuidado de la salud que
he conocido. Muy en especial dedicado a mi mamá, la mejor modelo de doctora que
me ha dado Dios.
Qué
es la medicina?
La medicina es parte de las ciencias de la salud,
es la ciencia que se dedica al estudio de la vida, la salud, las enfermedades,
y también la muerte, es la encargada de que recuperemos nuestra salud y de
mantenernos vivos, nos ayuda a prevenir, tratar y diagnosticar enfermedades.[1] En
mi concepto estudiar medicina es estudiarte a ti mismo, conocer todo lo que
integra tu cuerpo, desde las células más pequeñas hasta la piel que es nuestro
órgano más grande, estudiar el funcionamiento, el por qué de todo lo que sucede
en nuestro cuerpo, saber cómo tiene que funcionar y como repararlo si es que
comienza a fallar. “La medicina es el arte de prevenir y curar enfermedades”[2]
En lo personal soy gran admiradora de
los médicos que dedican la mitad de su vida a estudiar las más complejas
especialidades, así como también de los que se dedican vida a la investigación
y desarrollo de nuevas técnicas y medicamentos para curar enfermedades que
antes no tenían remedio .
Existen infinidad de especialidades,
cada una dedicada al estudio de una parte del cuerpo en particular. Algunos
ejemplos de especialidades más comunes son neurología, cardiología,
alergología, dermatología, ginecología, pediatría, urología, odontología, etc.
Todas tienen su nivel de complejidad.
Una explicación básica y rápida de las
especialidades que mencioné arriba sería: Siempre que pensamos en neurología
sabemos que se trata de nuestro cerebro y es correcto, pero la neurología se
dedica también al estudio de nuestra médula espinal y sistema nervioso y sus
posibles trastornos[3], en el cerebro es donde se
encuentra nuestro sistema nervioso central. Al pensar en cardiología sabemos
que se relaciona con el corazón, pero también estudia nuestro sistema
circulatorio. La alergología es la encargada del estudio de nuestras alergias
como lo dice su nombre, cómo el cuerpo recibe algunas sustancias y no las pude
tolerar. La dermatología es la encargada del estudio de la piel, nuestro órgano
más grande. La ginecología es el estudio de la mujer, específicamente de su
aparato reproductor y trastornos o problemas que pueda tener. La pediatría
estudia a los más pequeños, desde que salimos del vientre de nuestra madre
hasta que llegamos a los 18 años. La urología estudia nuestro aparato urinario.
La odontología, los odontólogos o más común conocidos como “dentistas”,
estudian nuestros dientes, también las encías, y maxilares.
Otra parte de la medicina que desde mi
punto de vista es la más importante es la anatomía, desde primer semestre en la
carrera de medicina se comienza a estudiar, la anatomía en mi concepto la
estructura de nuestro cuerpo, la posición exacta de cada hueso, cada órgano,
hasta de nuestras más pequeñas arterias. Nos ayuda a saber que lo que para
nosotros es una pierna normal está integrada por diferentes músculos cada uno
con su nombre. [4]
“La salud no lo es todo, pero sin ella
todo lo demás es nada.” -A. Schopenhauer.
Sin la medicina no podríamos
conservarnos sanos, sin la salud no podríamos hacer las actividades cotidianas,
hacer las cosas que nos gustan, que nos dan felicidad, sin la felicidad podemos
caer en una depresión muy grande porque apartados de las cosas que nos gusta
hacer y de la gente con la que nos gusta convivir, postrados en una cama no
tendríamos más deseo que mejor dejar de sufrir y morir. “Parte de la curación
está en la voluntad de sanar”[5] .Sin
el deseo de vivir ya no eres nada, no hay nada que te motive a recuperarte tu
cuerpo ya no hará más el esfuerzo por atacar la enfermedad solo se dejará ganar.
Las
carreras en la que puedo ayudar a las personas ya sea con su intelecto o salud
se me hacen muy atractivas, la convivencia con los niños me agrada, niños de
preescolar o primaria son a lo que me gusta ayudar y también convivir, soy
maestra de catecismo en mi iglesia y eso me ayudó a descubrir que aunque me
gusten mucho los niños y ayudarlos a prender, ser educadora no sería lo mi
carrera ideal, una vez a la semana es agradable y un poco estresante a la vez, pero
creo que no podría estar 5 días a la semana en constante atención hacia un
grupo grande de pequeños humanos. “Los únicos límites a nuestros logros del
mañana serán nuestras dudas de hoy.”[6] Se lo
que quiero ser y no dudaré de mis sueños.
Hace no mucho años, más o menos cuando estaba en primaria, en mi pequeño
grupo de amigas hicieron la siguiente pregunta “¿Qué quieren estudiar?” Es
curioso pensar que mi respuesta en ese momento, sin dudarlo fue… “Yo la verdad
no tengo aún la menor idea, pero yo nunca sería ni doctora ni contadora, no
quiero ser lo que son mis papás, ¡TODO menos
eso!” Con el pasar de los años cambió mi mente hace cerca de 2 años comencé a
reflexionar sobre lo que quería hacer de mi vida, y fue cuando me di cuenta que
el hecho de ser doctora, de hablar de cosas de medicina me motivaba, es
interesante pensar que estudiar medicina es estudiarte a ti mismo.
Cuando pienso en qué es lo que será de mí en el futuro no puedo evitar verme con una
bata blanca, “Ahora sé
porque los doctores visten de blanco, es que muchos de ellos al igual que usted
son como ángeles de la salud”[7]un
estetoscopio rodeando mi cuello, sonriente y dispuesta a ayudar a sanar a los
demás, servirlos en lo que esté a mi alcance, poner todos mis conocimientos a
su disposición. “Dondequiera que el arte
de la medicina es amado, también hay un amor a la humanidad.” [8]Esta
frase es una de mis favoritas, para mí tiene mucho significado y creo que es
muy cierto lo que dice porque no puede existir médico que odie la vida y a la
humanidad, para ser médico yo creo que necesitas tenerle amor a la vida y al
prójimo.
Me hace feliz pensar que podría
pasar la vida ayudando a muchas personas y que esas personas tengan fe en mí,
que confíen en que están buenas manos. Creo que son unas de las mayores
satisfacciones de ser médico. Dios ha puesto en mi corazón el deseo de ayudar a
los demás, siempre que sirvo a alguien en algo viene una a mí una felicidad muy
grande. ¡Quiero ser un médico que inspire esperanza!
“Rodéate con gente buena que te aliente y te cuide. Siempre habrá altas y
bajas, no importa cuán exitoso seas.”[10]
En mi familia tenemos un buen número
de doctores y enfermeras, mi abuelita una enfermera jubilada, muy buena
enfermera en su tiempo siempre al servicio y con mucho conocimiento, tíos y
tías, también primos. Me gustaría mencionar que un tío acaba de graduarse de la
especialidad de nefrología.
Por suerte he tenido un modelo excelente de doctora, mi madre es una
doctora que ama su trabajo, le gusta lo que hace y sabe cómo hacerlo. Ella es
mi primera inspiración, ella a es lo que a mí me gustaría llegar a ser. Mi
madre me habla de su experiencia como médico, me gusta mucho que me cuente
porque ella no me esconde nada, a través de sus experiencias me hace ver la
parte difícil y lo satisfactorio de estudiar esta carrera, también me comparte
distintas anécdotas de su vida como estudiante, como interna y como residente,
ver sus expresiones y la manera en que ella habla de todo lo que vivió, cómo
brotan las sonrisas en su rostro me gusta mucho. Esa es una señal de que no se equivocó
al elegir su carrera. Mi mamá es de esos médicos que no les importa quedarse
horas extras en su trabajo aunque no se lo paguen, ella se queda haciendo lo
que le gusta, más que trabajo para ella es hacer lo que le apasiona. ¡Qué padre
hacer lo que más te gusta y que te paguen! Yo quiero ser así como mi madre y
hasta ahora creo que la medicina sería mi carrera indicada.
Una persona una vez me dijo que ella no me veía de médico, porque me hacía
falta algo en mi carácter, no le entendí muy bien, creo que eso que me hace
falta para ella era mi fuerza al actuar, a veces son muy sensible en cuanto al
dolor ajeno, lo he estado trabajando porque era muy común en mi escuchar “es
que no te lo quiero hacer porque te va a doler y si te duele a ti me duele a mí
también”, estoy trabajando en eso, ya inyecto a mi mamá.
Estoy muy consiente que estudiar medicina no será nada fácil, soy también
consiente de todo el tiempo que tendré que dedicarle, las horas de estudio y el
estrés. Dijo Issac Asimov: “Ha sido
mi filosofía de vida que las dificultades se desvanecen cuando se enfrentan con
valentía.”[12] Una
frase motivadora para no perder el ánimo y ser valiente contra los retos de
nuestra vida.
Platicando con mi mamá sobre mi deseo de ser medico llegamos a la
conclusión de que sería buena si es lo que me apasiona y que ella cuando ya
esté yo cursando mis últimos dos semestres de prepa me llevará a la clínica
donde ella es la directora a observar un poco en urgencias y pedirá a los
doctores que me enseñen un poco, solo estaría como observadora primero ¡Eso me
emociona mucho!
Sanar a un enfermo para un médico es
algo común algo de todos los días, la madre Teresa de Calcuta dijo: “A veces
sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería
menos si le faltara una gota.”[13]
Reflexionando esta frase me di cuenta que muchas veces hacemos las cosas sin
valorarlas, en cambio la persona que recibe la acción lo vera de otra manera,
tal vez para el doctor sea algo de todos los días, lo más común revisar y
recetar, pero si el paciente sana el paciente estará infinitamente agradecido
con su médico, para el médico fue una gota en el mar, para el paciente esa gota
fue la que llenó el mar. Mi mamá siempre me ha enseñado eso como médico,
siempre con una sonrisa, con amor, la mejor disposición y ganas de servir.
La
medicina y mis primeros años.
Yo nací en ciudad Mante igual que mis padres, mi mamá estudio su carrera en Tampico y mi papá trabajaba aquí en ciudad Victoria. Después de un año de casados nací yo, después de un año y medio de que seguido acompañé a mi mamá a los ejidos a las pequeñas clínicas a atender a pacientes con pocos recursos y que mi mamá se dedicó a cuidarme y darme mucha atención y a cuidarme mientras mi papá trabajaba mucho mi mamá decidió irse a estudiar su especialidad a Tampico, con tan solo un año casi dos mi mamá con todo el dolor de su corazón (como ella lo dice) se tuvo que ir y dejarme con mi papá. Admiro mucho la valentía de mi papá y su amor hacia nosotras, aceptó toda la responsabilidad. Los fines de semana mi mamá venía a vernos.
Muchas
personas quedan traumadas por alguna enfermedad que llegaron a tener en su
infancia, he escuchado de personas que odian los hospitales, los doctores, las
enfermeras, odian todo lo que tenga que ver con estar enfermos, es cierto que
no es nada agradable sufrir una enfermedad cuando estás pequeño pero desde mi
punto de vista cada quien puede tomar su enfermedad de diferente manera, puede
que para ti una enfermedad sea una privación de hacer muchas, para mí una
enfermedad es ese lapso en tu vida que necesitas tener una pausa y deja que tu
cuerpo con ayuda de los médicos y medicamentos sane, una enfermedad es señal de
que estás vivo y que tu cuerpo te avisa que algo no anda bien, un muerto no
sufre de una enfermedad. Ésa mi manera de pensar sobre la enfermedad.
Desde
pequeña presenté problemas de asma, recuerdo que me nebulizaban todos los días
por la mañana, mi papá temprano se levantaba me ponía el nebulizador dormida y
al terminar de nebulizarme me comenzaba a cambiar así dormida, salíamos de la
casa y me iba a dejar a mi guardería, se llamaba Plaza sésamo ubicada en el centro, no muy lejos de Imagina. Por la
noche después de que mi papá llegara de su trabajo si no mal recuerdo me volvía
a nebulizar, y así todos los días. Viendo a mi papá como hacía todas esas
cosas, años después cuando nació mi hermano y tuvo una neumonía bastante grave
yo era la que ayudaba cuando lo nebulizaban a ponerle su medicamento, pues ya
sabía de memoria todo el procedimiento y me gustaba ayudarles a mis papás con
mi hermano era como mi pequeño muñeco.
Se decía
mucho antes que para las personas que tenían asma les ayudaba tener un perro
raza chihuahua para superar la crisis asmática. Virginia Quiñónez, quien ha
realizado estudios en pacientes asmáticos asegura que la compañía de una
mascota que no suelta pelo proporciona experiencias afectivas que ayudan en la
recuperación. [14]
Los perros chihuahua son la mejor compañía. Mi padrino Mario me regaló en el
2003 una chihuahua, la nombré Lizzy, ella vivió conmigo mis años de enfermedad.
Yo recuerdo que a veces antes de irme a la escuela la subía a la cama y la
nebulizaba a ella también. En la mayoría de mis recuerdos de mi enfermedad está
ella presente, desde entonces la conservamos como mascota. Vivió cerca de 14
años, hace una semana falleció y eso me hizo estar muy triste y recordar todos
los momentos que gracias a ella fueron buenos durante mi enfermedad.
No recuerdo las malas
experiencias con esta enfermedad mía, por lo mismo de que estaba muy pequeña no
tengo muchos recuerdos malos.
Mi mamá
cuenta que una noche me puse muy mala porque empecé con un cuadro de asma, mi
papá de inmediato llamó a mi mamá para saber qué era lo que tenía que hacer y
ella le indicó una dosis, mi papá me dio la dosis mal y me comencé a intoxicar,
me llevó de madrugada al hospital, me puse muy mal, no puedo ni imaginar la
preocupación, desesperación e impotencia de mi papá al estar viviendo eso.
Después de
sus tres años de especialidad mi mamá volvió y comenzó a trabajar en el
hospital, IMSS en la loma, después de la escuela ella iba por mí y me llevaba
al hospital si tenía que doblar turno me quedaba parte de la tarde en el
pasillo con la asistente medica del consultorio en el que estaba mi mamá o me
metía con ella al consultorio calladita en una esquina mientras ella daba consulta,
salíamos tarde de ahí, pero siendo sincera a mi no me molestaba. Muchos
pacientes que atendió mi mamá me recuerdan como la hija de la doctora que
siempre la acompañaba al trabajo en los turnos vespertinos.
Después de
unos años de estar en consultorio mi mamá le dieron el puesto de jefa de consultorios
del turno matutino, la rutina cambió porque tenía mucho más trabajo como jefa y
no solo estaba en su oficina, la mayoría del tiempo estaba checando papeleo o
el trabajo que hacían los médicos de los consultorios de los que ella se hacía
cargo. Yo me quedaba siempre sentada o dentro de su oficina jugando con un
calendario también afuera con la secretaria viendo a doctores y enfermeras
pasar, nunca me han dado miedo los hospitales y yo creo que es porque en mi infancia
me era muy familiar estar dentro de hospitales y convivir con doctores.
Cuando me
detuve a reflexionar me di cuenta que tal vez la razón por la cual toda mi
infancia me la pasé pensando en que nunca sería doctora era porque tenía en mi
pensamiento “mi mamá se fue porque tenía que estudiar para ser mejor doctora,
yo no quiero ser doctora yo no quiero irme y dejar a mi familia”, yo siendo
sincera no recuerdo mucho esa etapa de mi vida y pues no tengo ningún
resentimiento hacia mi mamá por no haber estado, pero al final de todo pues mi
pequeño cerebro de hace años no pensaba las cosas como hoy yo las pienso.
Cada quien
vive la enfermedad con diferente disposición, cada persona toma su enfermedad
como su cruz o como algo que está con ella, en mi parecer es más fácil superar
una enfermedad de pequeño porque solo le ves las cosas buenas a la vida, además
porque no tienes preocupaciones, obligaciones o responsabilidades. “La mayor
enfermedad hoy día no es la lepra ni la tuberculosis sino mas bien el sentirse
no querido, no cuidado y abandonado por todos.”[15]
Tal vez por eso para un niño es más fácil superar la enfermedad sin tanta
depresión como a veces los adultos que llegar a caer en ella.
¿Por qué estudiar medicina?
Explorando en internet
encontré 5 razones para no estudiar medicina[16],
no comparto mi pensamiento con su autor, pero al final cada persona tenemos
diferentes perspectivas. Para el autor de este artículo son razones por las
cuales no deberíamos estudiar medicina, para mí son buenas razones para
estudiar esta carrera.
Razón número
uno: Serás un aprendiz de por vida. Para los ojos de algunos es una razón por
la cual no estudiar esa carrera, para mí es una oportunidad de no ser una
persona conformista, “Yo ya estudie, yo ya aprendí, a mí así me enseñaron,
etc.” ¡Hay que estar abiertos a las nuevas maneras de hacer las cosas querer
seguir aprendiendo! “No
te conviertas en el cómplice de tus impotencias. Si te esfuerzas, con el tiempo
las superarás”[17] O irás aprendiendo como ir haciendo
las cosas durante el internado…También tendremos que estar al tanto de los nuevos
procedimientos o medicamentos y todo esto para un bien que es ayudar a las
personas a recuperar su salud. “Para hacer que una lámpara esté siempre
encendida, no debemos de dejar de ponerle aceite.” [18]
Como dijo la madre Teresa de Calcuta, a llenar siempre la lamparita de nuestros
conocimientos pues si le dejamos de poner aceite se apagará y nos vamos a
estancar en nuestras anticuadas maneras de hacer las cosas.
Razón número
dos: Exceso de burocracia y competencia. Dice el autor anónimo: “Son
quebraderos de cabeza, exigencias y estrés por todas partes”. La carrera de
medicina no es nada fácil exige competencia a los estudiantes, exige
conocimientos y también dedicación. Yo creo que toda la exigencia y estrés que
te ponen es para hacerte un buen médico, pues de no ser así cualquiera se
metería a esta carrera, tendríamos pésimos médicos, no cualquier persona
aguanta todo el tiempo que toma esta carrera.
Razón numero tres: Trabajo en equipo. El autor lo exhibe como razón
porque muchas personas no les gustan el trabajo en equipo o tienen algún
problema por compartir conocimientos. Para mí esta es una buena razón porque
siempre he pensado que dos cabezas piensan mejor que una sola, “Yo hago lo que
tú no puedes, y tú haces lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes
cosas”[19]
Siempre se cruzarán las especialidades y habrá necesidad de otro especialista
y de un buen trabajo en equipo de los médicos que atenderán al paciente.
Trabajar en equipo en mí pensar nos ayuda aprender más, escuchar las opiniones
de nuestro compañero, compartir conocimientos y experiencias. ¡Podemos también
aprender de los errores de los demás!
Razón número cuatro: Para estudiar medicina deben gustarte las enfermedades y querer aprender cómo se tratan. Debe gustarte saber cómo curar, pues el objetivo final de la medicina es: curar, expresó el autor. Si no estudias medicina con este fin qué caso tiene dedicar tantos años. También el autor nos dice que no siempre las enfermedades y los síntomas del paciente serán iguales o se presentarán de la misma manera en un paciente. “Las dificultades están destinadas a despertarnos, no a desalentarnos. El espíritu humano crece a través del conflicto”[20].Platicando con mi mamá sobre esto ella me expresó que por ese motivo se hacen los años de prácticas, pues ahí ya no es estudiar con los libros y con casos que ya están escritos, hasta ese momento aprendes a tratar no con la enfermedad si no con el paciente que tiene la enfermedad, la enfermedad se nos va a presentar de mil maneras diferentes en cada paciente por eso es importante saber lo de los libros y aparte en el momento de aplicar esos conocimientos aprender de las variaciones que en cada paciente puede tener la enfermedad. “El buen médico trata la enfermedad; el gran médico trata al paciente que tiene la enfermedad.”. En mi opinión es muy cierta la frase, la misma enfermedad puede presentarse distinto en cada paciente, como médicos no solo deberían saber tratar la enfermedad, sino también al paciente.
Por último…
Razón número cinco: Sacrificar parte de tu vida. “No puede haber arcoiris sin
nubes y tormentas.”[21]
Las nubes y tormentas serán esas noches de desvelo por estudio, el arcoíris
será la satisfacción de ayudar a la gente. Muchos dicen que “les gusta” al
ponerse a pensar en todo el tiempo, el estrés y demás que invertirán se echan
para atrás. Yo creo que si es lo que te gusta no importa cuántos años vayas a
pasar estudiando lo único que importará será llegar a ser eso que tu anhelas. En
esta razón no me guiaré por lo que dijo el autor. Albert Einstein dijo: “En
medio de cada dificultad reside la oportunidad.” Grandes oportunidades vendrán
si le ponemos todo el esfuerzo a lo que hacemos. Mi opinión es que grande es el
sacrificio y compromiso para esta carrera, pero creo que al final al ver a tus
pacientes sanos, sin ninguna dolencia es muy satisfactorio, si es lo que te
gusta al final todas las noches in dormir, todas las veces que faltaste a las
reuniones familiares o con amigos habrán valido la pena.”Anímate. Aunque la
vida no sea sencilla ahora, al final merecerá la pena. Todo se mejora con el
tiempo”[22]
Mi mamá una
vez me dijo: “A lo mejor uno como doctor puede olvidar a un paciente que haya
atendido siendo doctora, pero a un paciente nunca se le va a olvidar tu cara.”
Y me he percatado que es muy cierto eso, los pacientes que atendió mi mamá
cuando aún estaba en consultorio cuando la ven la saludan y siempre con una
sonrisa y agradecidos por lo que hizo ella un día por ellos. La siguiente frase
siempre me ha sido muy inspiradora, pues aunque para muchos a veces es cansado
y nada agradable servir a los demás, para mi es algo que disfruto hacer. “El
que no sirve para servir, no sirve para vivir.”[23]
¡Mi razón número uno por
la que quiero ser médico es ayudar a los demás! Claro que tengo más razones, pero
las anteriores mencionadas son las principales, seguro dentro de 10 años que
este cuando termine la carrera y esté por comenzar mi especialidad si Dios
quiere, podré volver a redactar mis razones.
Quiero estudiar medicina
y me gustaría especializarme en pediatría, al inicio del ensayo expresé que me
gustan los niños, o también me llama la atención la especialidad de
dermatología, es muy probable que estando en la carrera ya yo pueda cambiar de
opinión que me comience a gustar alguna otra especialidad, pero por ahora esas
son mis dos opciones: No puedo decir cuál prefiero de las dos, pero si me veo siendo dermatóloga o pediatra.
La medicina y yo ahora.
En vacaciones de verano
viajé a Europa, me fui de México pensando que sería un viaje normal, turistear
por las ciudades, miles de fotos (selfies) e interesantes descripciones de
parte de los guías turísticos. Pero lo que nunca pasó por mi mente fue que me
la iba a pasar cerca de 14 días en Niza, Francia haciendo visitas diarias al
hospital.
En el día 6
del viaje llegamos a Niza parecía que el día iba a acabar con un descanso toda
la tarde en el hotel, pero no fue así. Mi abuelo más o menos desde el medio día
de ese día comenzó a presentar los síntomas de infarto, pero nosotros no
estábamos muy seguros de que en verdad fuera un infarto. Cuando nos instalamos
en el hotel mi abuelo se empezó a sentir su corazón oprimido, llamamos a un
doctor esperando que no fuera algo grave, pero pasó, mi abuelo se estaba
infartando en ese momento. Vino la ambulancia y se lo llevó. Fuimos al
hospital. Yo estaba muy asustada, porque no sabíamos nada de francés y por los
nervios el inglés no me fluía casi nada. “
Hay dos
modos de afrontar las dificultades: cambias las dificultades o te cambias a ti
para hacerles frente”[24]
Gracias a
Dios a mi abuelo lo atendió el jefe de cirugía cardiotorácica el Doctor O,
Cheche, es uno de esos médicos jóvenes, estudiosos y dedicados a su carrera, el
la verdad es uno de los médicos que admiro, pues se veía muy feliz en lo que
hacía siempre con una sonrisa, esos médicos que dan esperanza, justo como yo
quiero ser.
A partir del
día 26 de julio fueron visitas diarias al hospital, nos trasladábamos en
tranvía mi abuela y yo, era un constante administrar dinero para las diferentes
cosas que teníamos que hacer. No me molestaba nada de estar en el hospital, me
agradaba ver a los médicos en acción, seguido me ponía a imaginarme siendo yo
doctora también me emocionaba mucho verlos así con sus batas y los llamados
pitufos, que son como la ropa que utilizan los cirujanos. Esa fue una de mis
experiencias ya de adolescente con la enfermedad. “Cuanto más oscura es la
noche, más brillantes son las estrellas. Cuanto más profundo es el dolor, más
cerca esta Dios.”[25]
No fue la más linda de las experiencias porque siendo sincera si sufrí esa
experiencia, no fue nada fácil vivir dos semanas en un hotel, yo tenía que ser
muy responsable y ayuda a administrar a mi abuelita el dinero para gastar en
tranvía y en comidas, lo cual después de todos esos días ya me provoco un
cansancio; esta experiencia me ayudó a experimentar la vida en un hospital
desde el punto de un paciente, para que cuando yo sea la doctora esto me ayude
a comprender y tener esa empatía por los enfermos y sus familias, aun más si
son extranjeros, también me deja una enseñanza muy importante: Nunca es
demasiado temprano para ser responsable y madurar, ya que para mi ese fue una
prueba de resistencia, madurez y responsabilidad, ¡creo que la superé bien! “Se
supone que los desafíos de la vida no están para paralizarte; están para
ayudarte a descubrir quién eres.” [26]Le
doy gracias a Dios por haberme permitido vivir algo así, aunque en su momento
no fue grato del todo viéndolo ahora con más calma y claridad me dio una
experiencia para algún día poder ser mejor médico y persona.
“Las
fracturas bien curadas nos hacen más fuertes.”[27]
Me interesan
mucho los temas de medicina y cuando hablan de enfermedades y sus síntomas,
parezco niña pequeña. La mayoría de las veces que veo algún caso medico en una
serie que me gusta ver seguido me gusta estarle preguntando a mi mamá de
algunos términos médicos que mencionan en una serie que habla sobre medicina. Estoy
ansiosa por que mi mamá me lleve el próximo año a la clínica donde ella es
directora para observar y así familiarizarme con el ambiente, medicamentos, y
aprender un poco de cosas prácticas antes de entrar a la carrera.
Dios tiene la última palabra.
“Puedes obtener miles de
nos de la gente y un solo sí de Dios.”[28]
Muchas veces en la medicina ya los doctores no tienen más opciones, se acaban
las opciones de medicamentos, los procedimientos y es ahí cuando solo queda
esperar, ¿Esperar qué? Para muchos no creyentes, por frío que se escuche es
esperar a que el enfermo fallezca, llamar a los familiares para que lo vean por
última vez. Pero para los que creemos en que existen los milagros es un esperar
con fe de que si es voluntad de Dios el enfermo sanará, y si fallece pues
tenemos fe en que es la voluntad de Dios y que ya está mejor sin sufrir. La fe
actúa donde la medicina ya no puede llegar. Muchas veces nosotros nos aferramos
a las personas, y por ningún motivo queremos que mueran, como médico yo creo
que también, pues es una vida de la cual tú estás encargado de cuidar y de
estar dándole sus debidos medicamentos para ayudarlo a sanar, es muy difícil
también para el médico como para los familiares aceptar que ya no hay más
remedio. Y si eres un médico que tiene
fe no queda más que pedir a Dios.
[1] Anónimo. Rcuperado de https://es.wikipedia.org/wiki/Medicina.Visto
martes23 de enero 2017, 3:41 pm.
[2] Cardozo, G. Recuperado de:
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[3] Anónimo. Recuperado de:
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[4] Eustachihttps B. 1564 publicación del libro. Recuperado de
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[8] Barrios, G. Recuperado de:
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[9] Taylor, S. Recuperado de: http://www.lifeder.com/frases-de-medicina/.
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[10] Liberatp, L.Recuperado de:
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[18] Calcuta, T. Recuperado de:
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[21] Vincent, J. Recuperado de:
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[22] Anónimo. Recuperado de:
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[24] Battome, P. Recuperado de:
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[25] Anónimo. Recuperado de:
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[26] Reagon, B. Recuperado de:
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[27] Emerson, R. Recuperado de:
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[28] Perry, T. Recuperado de:
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